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domingo, 27 de diciembre de 2020

El niño de la alberca

La historia que anda rondando en Internet

El sábado fuimos mi primo, su novia, mi esposa y yo a  unas albercas privadas muy reconocidas aquí en el estado, ya cuando se nos acabó el tiempo y al salir de la alberca nos tomamos la fotos del recuerdo, cuando mi esposa toma la foto de repente grita al ver la foto un niño, pues yo desconcertado y pensando que era broma, veo la foto, y  sentí un tremendo escalofrío la verdad después de eso se empezó a sentir un frío muy intenso, y nos salimos rápido y hasta nos vestimos afuera de la alberca.

Vía: Conciertos de Juarez/Diario el impacto.

martes, 29 de septiembre de 2020

El callejón del muerto

Otra de las famosas leyendas de la provincia de Oaxaca es la que se refiere al callejón del muerto, por un misterioso y espeluznante evento que ocurrió en una parte de la conocida calle llamada 2 de abril.

En la época en la que la luz eléctrica no existía, las calles de adoquines eran custodiadas por hombres que recibían el nombre de serenos. Durante la oscuridad, ellos custodiaban las calles alumbrando con faroles.

Una oscura noche, un desgarrador grito rompió el silencio. El sereno se fue corriendo a la iglesia a buscar al párroco. Al ver al cura, le informó que en la calle había un hombre apuñalado que se estaba muriendo y solo pedía ser oído en confesión.

El sacerdote salió junto con el sereno hasta el callejón; allí yacía el moribundo. Durante un rato, el clérigo escuchó una penosa confesión hasta darle la absolución.

El herido cayó muerto. Cuando el párroco buscó en la oscuridad a su acompañante el sereno, solo encontró su farol.

Por simple curiosidad, acercó la lámpara al rostro del muerto: era el mismo sereno el que yacía. Cuenta la leyenda que el sacerdote corrió despavorido a la iglesia para refugiarse. A partir de ese momento, el clérigo quedó sordo del oído por donde escuchó la confesión del moribundo.

lunes, 9 de diciembre de 2019

El negro de San Juan Chamula

Cuando los españoles llegaron en 1924 a dominar estas tierras, los chamulas continuaron con sus costumbres y se negaron a que se construyese una iglesia.

Un capítulo cambió la opinión de los habitantes cuando un negro con fama de chamán y de tener poderes con la capacidad de aniquilar a sus enemigos comenzó a alarmar a la población. La influencia de este personaje, pese a no ser chamula, fue haciéndose muy fuerte.

Los chamulas creyeron que lo anterior quizá estaba sucediendo precisamente por prescindir de una iglesia. Entonces los habitantes pidieron a este mago que indicara el lugar donde debía construirse la iglesia, como una especie de reverencia. Entonces el negro en un pedestal a 40 m de la puerta principal donde hoy está la iglesia se paró. Dio una vuelta silbando y ocurrió que de lo lejos, dejando atónitos a todos, llegaron piedras que fueron convirtiéndose en carneros, el conjunto de animales permaneció junto al negro y entre ellos parecían entenderse, luego fueron convirtiéndose de nuevo en piedras. Hubieron algunas rocas que no acudieron y el negro molesto las llamó Chajancavitz, que quiere decir El Cerro de las Piedras Haraganas. Este montículo de rocas rebeldes son las que posan a la izquierda de la carretera, un poco antes de llegar a Chamula.
Leyenda Mexicana

lunes, 8 de julio de 2019

El dueño del monte



Tomó un puñito de tabaco y lo puso en su boca, estaba tranquilo, inmóvil, con la respiración lenta, sentía el sabor de la relajante hierba, recorriendo toda su boca y eso lo tranquilizaba aun mas. Todo seguía su curso cotidiano, las aves, los insectos y los diferentes animales, como si él no estuviera, hasta que él quebró esa calma una vez que halo el gatillo, un sonido atronador vino de golpe y el animal cayó al suelo, muerto por la bala que había dado en el cráneo. El cazador sonrió y se levanto de su escondite, los demás animales corrieron al escuchar el sonido del arma, se acerco a aquel venado que yacía en el monte y lo observo durante un corto tiempo, "como siempre", pensó, "un buen día de caza".

Durante toda su vida, solo había amado una cosa...la caza, su abuelo, su padre y demás familiares, le habían enseñado la actividad, pero una vez que agarro camino, nadie pudo detenerlo, se hizo su mayor afición el cazar animales, disfrutaba de esta actividad, como nadie más. Su familia no lo criticaba, pues siempre traía algo, pero había ocasiones que se perdía, que se iba días y volvía con presas poco frescas o en mal estado. Habían pasado años desde que aquel joven tomara su primera arma, ahora ya era un hombre curtido en la caza, bajaba al pueblo a contar sus aventuras a la cantina, mientras se fumaba un tabaco o lo mascaba, disfrutaba narrando, cómo perseguía a sus presas y sobre todo como las mataba.
Ese día había ido muy tranquilo, había matado a su presa y la observaba con algo de desprecio, no era lo que buscaba, era buena presa, pero no el animal que deseaba como premio, se levantó nuevamente y llamó a uno de sus compañeros, le regaló su presa y se volvió a perder en la espesura del monte, disgustado y mal hablando, seguía buscando a aquel venado de la mancha negra, aquel que nadie podía atrapar, aquel que perseguía desde hace tres días. 

Se perdió un día más rastreándolo, cada vez más adentro de la espesura del monte... por fin lo vio a lo lejos, distraído y comiendo tranquilamente. Se acercó a una buena distancia sin que su presa lo escuchara, se acomodó en una zona elevada, camuflejado por la espesura y se tomó su tiempo, apuntó el arma, sacó su puño de tabaco y lo empezó a mascar, sonreía, otra vez la calma y el animal no sabía que ese día moriría.

Una tos comenzó a atacarlo, quiso no hacer ruido, pero el ataque fue muy severo, el tabaco se le había atorado en la garganta y no podía sacarlo, intentaba de manera desesperada el salir de esa situación, pero todo fue en vano, se resbalo de aquella zona elevada donde se había escondido y rodó por la barranca, sintió que la vida se le escapaba, luego no sintió nada, lo ultimo que vio fue al venado, mirándolo confuso aun en la lejanía, demonios...ese día no hubo buena caza.

-Tu...que hiciste lo que querías con los animales. Tu...que los torturaste y los mataste solo por diversión. Tu...serás castigado, no habrá descanso, hasta que se te perdone el insulto que le has dado a la naturaleza- Sentenció una voz gruesa a la lejanía
-Yo, pero ¿por qué?, ¿quién eres para juzgarme?, ¿qué te he hecho?-Sollozaba el cazador, confuso sin saber donde estaba, solo había penumbras a su alrededor, lo que le impedía ver mas allá de sus dedos.
-¡Tu...me cazaste...me heriste...me torturaste...y luego me dejaste morir, ahogado en mi sufrimiento!- Gritaron muchas voces al unísono, taladrando los oídos del cazador -Y ahora mostraras respeto a aquellos que cazabas, ahora estarás a su servicio, ahora su sufrimiento será tan tuyo como ha sido mío. No vuelvas, solo hasta que yo llame por ti, vete, que los animales serán tuyos y has de cuidarlos....-



Mucho Tiempo Después

Un cazador había dejado a tres conejos malheridos por el camino y ahora apuntaba a un puerco de monte, que se veía más suculento, disparó, pero por alguna razón, erro el disparo y el animal huyó, sorprendido por esto el cazador verifico su arma, Hasta que el resquebrajarse de las hojas secas en el suelo, le hizo voltear la mirada, un hombre de avanzada edad se encontraba parado detrás de él, con los tres conejos muertos agarrados por la piel. El cazador quedo helado, sin saber qué hacer.
-¿Quién eres?-Pregunto el cazador
-Yo...soy el dueño del monte, llévate una presa, solo a una y caza sólo cuando lo necesites- El viejo colocó a los dos conejos en el piso y de inmediato, estos se levantaron y salieron huyendo, al ultimo lo dejó también en el suelo y le indico al cazador que lo recogiera. El hombre sorprendido, no dijo nada, solo tomo el conejo y se retiro del lugar, lo más rápido que pudieron llevarlo sus piernas.


El dueño del monte fue un cazador ambicioso, un día buscando a un animal que decían legendario y difícil de cazar, solo encontró la muerte, ahora en castigo a todo el sufrimiento que había propiciado a los animales, se encarga de cuidarlos. Cuidado si subes al monte a cazar, te recomiendo dejar un buen tributo para que te deje pasar a sus tierras, quizás un puño de tabaco, que en vida fue su mayor vicio, junto al de la caza.

lunes, 1 de julio de 2019

La muerte de la mala mujer


Esa noche había algo extraño en el camino, el caballo andaba inquieto y los sonidos de los animales nocturnos, parecían ya muy lejanos. Aun así, Mauricio cabalgaba desinteresado de su entorno, hundido en sus pensamientos, no podía creer que hasta hace unas horas, se hubiera peleado con Martina y que todos los planes de aquella noche, se le vinieran abajo. Ahora sin el calor de su enamorada, tenía que volver a casa buscando alguna excusa que inventar, cuando sus padres le preguntaran la razón de tan pronta llegada.

El caballo se movió de manera brusca y trajo a Mauricio nuevamente a la realidad, a unos cuantos metros, se hallaba una hermosa mujer, de piel color canela, alta y esbelta, con un vestido blanco que desdibujaba una hermosa silueta. Mauricio no lo pensó mucho tiempo, retomo el rumbo que el animal parecía esquivar y pese a su negativa, se acerco a la hermosa dama.


-Buenas noches señorita, ¿Qué hace una bella mujer a tan altas horas de la noche?

-Hombre, que bueno verlo, ando sola y ya es muy noche, acompáñame a mi casa y si gustas puedes quedarte conmigo y pasar la noche-

Para Mauricio, eso fue música para sus oídos, paso por alto que no contestara su pregunta y pensó en olvidar a Martina, en el regazo de aquella mujer, por lo que bajo del caballo, para ayudar a subir a la señorita. La mujer hizo caso omiso a esta acción y comenzó a caminar por su cuenta, Mauricio la siguió para convencerla de que era más rápido en el animal, pero por más que intentaba darle alcance, la mujer se movía muy rápido, se adentro en uno de los senderos del monte y se perdió, como si de una sombra se tratara. Asustado, Mauricio corrió hasta el caballo y salió disparado de aquel lugar.

Al otro día, Mauricio se levantó muy temprano para platicar con el señor cura aquella situación:

-Se escucha interesante lo que me cuentas, pero sabes, no eres el primero que ve a aquella mujer, dime hijo.... ¿Te atreverías a volverla a ver?

-No creo padre, ¿A qué viene la pregunta?

-Pues mira hijo, es posible que te salga nuevamente y temó que para la siguiente logre perderte. Tengo un plan que me parece será infalible, que te parece si intentamos atrapar a este ser...

Era ya muy noche, cuando Mauricio andaba por los rumbos de la cañada, en esta ocasión, decidió concluir el tramo a pie, nuevamente el sentimiento de algo extraño, el frió en la atmosfera, el sonido muerto de los animales nocturnos y a la lejanía la silueta de una mujer, se acerco con cautela y la saludo. 

-Buenas noches buen hombre, iba camino a mi casa, pero me da miedo andar por estos rumbos tan de noche, te gustaría acompañarme, puedes pasar la noche conmigo.- Repitió una oración similar a la del encuentro anterior. Mauricio solo se limito a asentir y siguió a la desconocida, pero en esta ocasión un poco más atrevido, logro alcanzar a la mujer y saco con nerviosismo una aguja capotera, amarrada a un bollo de hilo, el cual clavo con fuerza en la cabeza de la mujer, cerró los ojos esperando una respuesta agresiva, pero la mujer se perdió en el fondo, desvaneciéndose en la oscuridad, como si nada hubiera pasado, rápidamente se persino y notó que el bollo comenzaba a desenrollarse, tomó el último extremo del hilo y lo amarro a la rama de un árbol, nervioso, corrió en dirección a San Fernando, hacía una de las casas mas cercanas, después del largo trayecto, encontró a varios hombres aún despiertos, esperando la llegada de aquel joven valiente.

-Ya está hecho-dijo jadeante, bañado en sudor y todavía nervioso, al padre, que se encontraba en medio del grupo.

-Excelente Mauricio, lo que has hecho esta noche, será de ayuda para todo el pueblo

-Entonces padre, ¿Hay que seguirla?

-No, hoy podría ser peligroso, la noche es el momento de aquel ser, mañana la seguiremos y le podremos fin a esto.

Al amanecer un grupo de doce hombres armados con machetes y uno que otro con arma de fuego, se abrían paso entre la maleza, siguiendo el rastro del hilo, después de caminar un buen rato, llegaron a una cueva, a la que le dicen "la cueva de la chepa".

-Juan- Dijo el padre -vete con Fernando por unas linternas a la casa de Tito, no entraremos a ese lugar sin luz- Vieron a los hombres alejarse y esperaron a que estos se divisaran de nuevo, el padre aprovecho para bañar con agua bendita a los valientes y dar una pequeña oración, los enviados no tardaron mucho, llegaron con linternas, candiles y un paliacate amarrado en forma de bolsa, después de que los últimos hombres fueran bendecidos, encendieron las herramientas y santiguándose, se adentraron en aquella oscuridad, no sin antes que Fernando colocara el paliacate en la entrada, como tributo al dueño de la cueva, para que los dejara entrar y salir. /div>


-No se separen, ni se asusten con lo que escuchen o vean, recuerden tenemos que estar juntos y vamos con Dios, caminando con nosotros- Dijo al padre a aquel grupo, todos asentían, pero sus corazones estaban llenos de miedo y dudas. 

La luz de los candiles, alargaban las sombras haciendo figuras y siluetas en todos lados, no faltaba alguno que diera un brinco del susto, pensando que alguien los observaba, la oscuridad se alejaba conforme el grupo avanzaba, sus pasos y uno que otro murmullo, eran los únicos sonidos que se escuchaban dentro de la cueva, caminaron un buen tramo siguiendo el hilo, a medida que se adentraban, el clima descendía hasta el punto en que los hombres sacaban vaho, la respiración se hacía pesada y la paranoia crecía, el hilo parecía no llevar a ningún lado, las siluetas se hacían cada vez más definidas, ya no se trataba de sombras, sino de figuras bien definidas, ruidos de pasos, de susurros, silbidos y llamadas de nombres, hacían que los hombres miraran de un lado a otro, la tensión estaba en la atmosfera y el aire estaba impregnado de miedo.

-¡Ya basta hombres!- Grito el padre enfurecido- ¡Dejen de tener miedo, eso es lo que busca el demonio, asustarnos, separarnos y que nos rindamos!- El padre camino hacia adelante y comenzó a gritar a la nada, risas salieron de todos lados, como si la mismísima cueva se burlara de ellos y luego se hizo nuevamente el silencio y una corriente de aire helado, llegó del fondo de la cueva. Los hombres continuaron caminando, ahora guiados por el padre, las risas se seguían escuchando aunque más suaves, acompañado de voces de hombres, llantos de niños y mujeres, esos sonidos eran desesperantes, cuando llegaron al final del hilo, sintieron que se les estrujaba el corazón, la aguja estaba ensartada en la cabeza de una enorme serpiente del tamaño de dos hombres y el grosor de uno, y de ella emanaban las múltiples voces que habían escuchado antes, los hombres se quedaron petrificados, dándole tiempo al animal para esconderse en las sombras.

-¡Disparen, se nos está escapando!- Grito uno de los hombres y aquellos que llevaban pistola, dispararón a la oscuridad, fallando todos los tiros, los hombres se juntaron y el padre comenzó a leer la biblia, escuchaban el arrastre de la serpiente, pero no sabían dónde estaba, de un momento a otro, el animal salto y golpeo a uno de los campesinos, paso tan rápido y repitió el mismo método, tres veces más, las carcajadas del animal rebotaban con las paredes de aquel lugar, lo peor ocurrió cuando la serpiente arrastro a Fernando a la oscuridad, en esta ocasión, los disparos le alcanzarón, y un horroroso grito emano del monstruo, haciendo que las linternas se fundieran y los candiles se apagaran.

El horror se desato, gritos ordenando que encendieran nuevamente las linternas, golpes al aire o chocando con las rocas y disparos se escuchaban en aquel lugar frió y oscuro, alguien grito por allá, otros oraron a Dios y el padre pedía calma. Cuando las luces volvieron, Mauricio ensangrentado y con varias heridas, apuñalaba con un cuchillo al animal, los demás no lo pensaron dos veces, corrieron a apoyar al compañero, dejando llover los machetazos, mutilando al animal en todas partes, dándole finalmente muerte.

Pasada la euforia, se dieron cuenta de los daños, la mayoría estaba lastimado, desde raspones a brazos y tobillos zafados, pero el más lastimado era Mauricio, quien habíahhhh sido mordido y golpeado en la oscuridad, no sabían si aquel ser tenía veneno, pero había que llevarlo a ser atendido, recogieron todo, purificaron el lugar y se retiraron con prisa, al salir los rayos de sol convirtieron en humo, al anibmal asesinado. El grupo preocupado por Mauricio acelero el paso, hasta el pueblo donde los atendieron y curaron sus heridas, por suerte para el más grave del grupo, el animal no tenía veneno, pero si le dejo una marca dolorosa.



Para cuando caía la tarde, en los alrededores se hablaba del heroísmo de estos hombres, de aquellos que habían dado muerte a la mala mujer. En los patios, cocinas, caserones, cantinas y lugares de concurrencia se contaba del tema. Desde entonces dicen los ancianos que por este tramo, la mala mujer ya no se aparece.


Adaptación: Luis C. Perez

Leyenda La Mala Mujer
Chiapas para niños, leyendas
Reconocimientos a Don Modesto

La gallina encantada


Chiapas, México

Cuentan los más viejos de estas tierras, que por los caminos de copoya, había una cueva, a la que los locales conocían como la cueva de la gallina encantada.

Se dice que en ocasiones, salía una gallina de aquella cueva, la mayoría intentaba darle alcance, pero por más que intentaban capturarla, nunca lo lograban, no fue hasta que en alguna ocasión, alguien de quien no se recuerda el nombre, noto que la gallina tenía polluelos, con este descubrimiento, el abusado logro capturar a una de estas crías y llevarlo a su casa.

Cuál sería su sorpresa cuando este polluelo creció, que era capaz de dar muchos huevos y mejor aún muy buenas crías, que crecían en menos tiempo, así empezó el hombre a vender huevos y gallinas, pero por más que intentaba inventariarlas, estas parecían multiplicarse, sin dar tiempo a nada. Los dueños de aquel ejército de gallinas optaron por regalarlas también, donarlas a fiestas, celebraciones a la iglesia, pero aún así el número no parecía descender.

El hombre desesperado por el aumento inexplicable de su población de gallinas, busco a aquella que había iniciado ese caos y cuando la encontró, le dio muerte. Desde ese día la población de animales de granja disminuyo, hasta volver a los números aceptables.

Adaptación: Luis C. Pérez

miércoles, 26 de junio de 2019

Auxilio




Victor Armando, era el nuevo velador diurno de la colonia, un hombre de unos veintiseis años, moreno, cabello oscuro, complexión media y actitud carismatica. Salía a dar sus rondas en una motocicleta de color negro, con su uniforme azul, un tolete del lado derecho y una lampara del otro, junto a una radio. Durante un mes no reportó nada mas que un chamaco pintando paredes. A los dos meses le comentaron que podía ganar mucho mas, en el turno nocturno y que podía cambiarse si así lo deseaba. Armando no dudo en aceptar el cambio, contento de la amplia remuneración, se presentó a las nueve de la noche para dar sus rondas.

Tres días despues, como a las once de la noche oyo la radio sonar, no entendió bien, pero alguien necesitaba apoyo del lado norte de la colonia por donde se levanta la colina, escuchó de una mujer en problemas. No lo dudó, avisó a su central que iba inmediatamente, se persigno y cambió su rumbo en dirección a la zona.

Cuando llegó al lugar señalado, vio a varios habitantes platicando afuera de sus casas, los rostros expresaban confusión y miedo. A la lejanía por el camino de terraceria vio a un compañero, se acercó a él, para que lo pusiera al tanto de la situación.

-Hey, Jaime ¿qué esta pasando?- Preguntó el velador, mientras se estacionaba.
-No se muy bien Victor, pero me alegra verte. Apenas acabo de llegar, comentan que una mujer estaba pidiendo ayuda, pero desde que vine no e escuchado nada, dicen que es por alla- Y señalo una quebrada.

-Si era en la quebrada, ¿qué chingado hacías en este camino?

-Pues como esta todo accidentado, pense en bordear, por eso baje por aca, pero los vecinos no estan seguros de donde venía el grito.

Otros dos veladores llegaron y Jaime les dio la misma explicación, en ese momento un grito desgarrador se escucho, una mujer joven pedía auxilio, probablemente por la emoción, pero el aire se puso mas frio en ese instante. Los veladores no lo pensaron mas, eligieron bajar por la quebrada otros tres vecinos, sacaron lamparas y para apoyar bordearon por el camino, armados con machete y porras.

-Auxilio- El grito desgarro nuevamente el aire y un llanto corto le acompaño. Mas personas salieron para intentar apoyar con lamparas, a los veladores que ya descendían por la accidentada quebrada.


-Ayudenme- Se escuchó nuevamente y otro lamento preocupó a los presentes, "pobre mujer", "la han de estar lastimando" murmuraban.


Los veladores terminaron el accidentado descenso, con no mas que manchas de lodo y uno que otro raspón, el grupo de civiles, con dos personas más, apenas e iban rumbo al punto de reunión, así que por lo urgente del asunto los veladores se metieron a la zona de arboles.
Victor Armando, caminaba entre los arboles junto a sus compañeros, el miedo y la incertidumbre, le habían llenado de sudor las manos y le habían erizado los bellos del cuerpo. Gritaban a la nada esperando respuesta, ¿esta bien? , ¡siga gritando!, ¡donde esta!, pero nadie respondía. Victor miró hacia atras y vio las luces de los civiles, corriendo en dirección a ellos, despues de un rato los alcanzaron y se internaron todavía mas en aquel mar de arboles.

Nuevamente los gritos se escucharon y el grupo siguió adelante, caminando por un buen rato. Llegaron hasta un amplio espacio y despues de discutirlo, decidieron que aquello parecía una broma, algo no estaba bien, aquella voz parecía alejarse mas, lo mejor era regresar, por que terminarían perdidos. En ese instante, el llanto se escucho mas fuerte, pero no sabian de donde venía con exactitud, miraban a todos lados, pero veían sombras fugaces, que se movían de un lado a otro, escondiendose entre los arboles, parecía que estaban rodeados.

Los hombres inundados de miedo alumbraban de un lado a otro, intentando enfocar a aquellos que les rodeaban, pero sin exito. El ambiente era tenso y el llanto de aquella mujer lo hacía peor. "Vayanse a la verga" grito un civil y avanzo de regreso, los demas le siguieron, hasta que un viento fuerte y helado los golpeo de frente, las luces de las lamparas se apagaron y una risa resono en aquel claro.

Despavoridos corrieron en completo desorden, se gritaban para no perderse, pero no era suficiente, aquellos hombres corrian sin importarles nada, no tardaron mucho en dispersarse. Victor Armando sentía que le seguían, ya no sabía si aquello que veía eran sus compañeros o las sombras extrañas. En su desesperación, tropezo con algún obstaculo y cayo directo al suelo.
 
Al levantarse Armando quedó paralizado, una extraña silueta se encontraba de frente, como si lo observara. Fueron unos segundos de silencio, los gritos se oían lejanos, algunas luces de las linternas, se habían encendido nuevamente y se movian formando mas sombras. Armando le dio dos vueltas a su linterna, se oyo un "click" y la luz salio nuevamente. Apuntó con la mano temblorosa a aquel ser de sombras y solo encontro la oscuridad.

La constante risa se escuchaba en la oscuridad, un aroma fuerte penetro en los pulmones de Armando y lo devolvio a la vida, era alcohol. Desconcertado miro a todos lados, sus compañeros veladores estaban alrededor y se encontraba fuera del oscuro mar de arboles.


-¿Que paso?- Preguntó.


-Te desmayaste- Contestó Jaime -Escuchamos tu grito y no te podiamos dejarte tirado, así que nos amarramos los huevos y fuimos por ti, te encontramos inconsciente y como pudimos, te trajimos hasta aca.
 
Armando no preguntó mas, simplemente no quería saber, todavía veía imagenes que no comprendía y escuchaba aquella risa seca rondandole la cabeza. Vio a una camioneta de policias a lo lejos, la cual bordeo por la terraceria, no encontraron nada.

La descripición del lugar donde estuvieron los hombres no concordaba, el espacio no era tan amplio, como para caminar tanto tiempo. La mayoría de personas opina que fue un ataque de pánico, que confudieron las sombras, que el ruido era el viento que movia los arboles.

Armando renuncio a los pocos días "la paga no es suficiente" dijo. En la colonia es comun que el grito se siga escuchando, pidiendo auxilio y ayuda, lamentandose, desgarrando el aire. Este no ha sido el único grupo que ha ido buscando a aquella misteriosa mujer, son varios los que se han internado, pero con consecuencias leves. Por eso a cada velador nuevo le advierten, que no siga los gritos de aquella mujer, que al parecer busca perderlos.
Fuente:                        bauldeleyendas.blogspot.com

Autor: Luis C. Pérez

La malora




Cuenta la leyenda que La Malora era representada por una mujer bella que aparecía únicamente a determinadas horas del día, anochecer, media noche o mediodía. Su belleza y encanto atraía a su víctima, principalmente hombres, a quienes hacía seguirle en son de burla; si éste se resistía se transformaba en un ser querido de la víctima como la madre, hermana, novia o esposa hasta conseguir su objetivo.

La malora solía aparecer en lugares apartados o por los caminos y sobre todo a persona en estado de ebriedad para hacerse seguir. Si una persona queire asirla, se escabulle y reparece más adelante, llevando así a su víctima por lugares intrincados, llenos de zarza y maleza.

Para deshacerse de este ser se utiliza un cinto o faja preparada o curada con un rito que muy pocas personas conocen y la próxima vez que aparezca se debe atrapar con el cinto y al instante se convierte en un manojo de hojas secas.


Leyenda de la costa Chiapaneca

lunes, 17 de junio de 2019

El demonio de la catedral de México

La Catedral de la Ciudad de México cuenta con amplios sótanos en los que al parecer se albergan algunos misterios, como el del "Demonio de la Catedral", que espantó a muchas personas en el año 1629.

Los escritos de esta interesante narración fueron localizados por el investigador norteamericano Robert Freeman, colaborador de la revista FATE. De acuerdo a sus informes, los hechos tuvieron lugar durante las últimas etapas de la construcción del templo, agregándose que por su importancia existen numerosos testimonios de ello en los archivos eclesiásticos. El manuscrito original donde se relatan estos hechos fueron proporcionados por un profesor mexicano cuya familia lo guardaba desde hacía mucho tiempo.

Todo comenzó con la inundación ocurrida en 1625 "Por este tiempo los superiores de la orden de los monjes Franciscanos, que hasta entonces habían celebrado sus ceremonias religiosas en la casa de Hernán Cortés, decidieron usar para tal fin una capilla inconclusa ubicada dentro de la Catedral, en aquel lugar, y para su comodidad, instalaron sus claustros.
En el año 1629 las aguas del lago que rodeaba a la Ciudad de México se elevaron a un nivel sin precedentes inundando gran parte de la urbe. Entre los sitios invadidos se encontraba la Catedral, cuya base desapareció bajo el pantanoso líquido. Esto tuvo por resultado que se interrumpieran los trabajos de construcción que se realizaban en la Catedral.

Un día dos monjes descubrieron, con sorpresa y alarma, un sarcófago de mármol ubicado dentro de un pasillo de la Catedral, que antes había estado vacío. El objeto medía más de dos metros de largo por uno de ancho y estaba medio sumergido en el agua lodosa".

La "cosa" dentro del Sarcófago "Los monjes corrieron a contarle a su superior acerca del asombroso descubrimiento y él decidió investigar por sí mismo, por lo que tomando un candelabro se dirigió al sarcófago. Lo primero que notó fué que había en la tapa un hoyo de unos ocho por diez centímetros cuyas orillas se encontraban sucias y viejas. Alumbró con el candelabro el agujero para tratar de ver lo que estaba adentro y, entonces, emitió un espantoso grito y tapándose los ojos huyó del lugar a toda carrera. Más tarde y ya tranquilo explico que había gritado al ver que algo se movía dentro de la caja; agregó que había notado más detalles que conferían al asunto un halo horrible; adentro había algo que no era ni humano ni animal, algo horripilante que le heló la sangre en las venas por la mirada de maldad e intenso odio que tenía. "Aquello" no hizo ningun ruido, pero inmediatamente se apartó del hoyo bajo la mirada atónita del monje. Los acompañantes del superior agregaron que al mismo tiempo que esto ocurría se escuchó dentro de la caja el ruido de algo que se escurria y la estancia se lleno de un olor blasfemo".

Un Demonio Prisionero "Nadie pudo explicar cuál era la finalidad de guardar semejante objeto profano en una Catedral sangrada, salvo que de esta manera se tratara de cuidar al mundo de los terribles poderes del ser que contenía el Sarcofago. En este caso, la iglesia le servía de prisión al demonio, evitando que pudiera hacer daño; sin embargo, nadie supo cómo había llegado ahí ni cuál era su origen. Los monjes estaban seguros que los restos no eran de un cristiano, ya que no había ninguna cruz grabada en el sarcófago; por otra parte, tampoco era posible apreciar algún tipo de nombre, fecha o indicio de su origen. Una mañana, poco días después de que la inundación había cedido, un grupo de monjes se reunió alrededor del sarcófago y uno de ellos se sentó sobre la tapa, cubriendo con su hábito el agujero de la misma. Poco después, al levantarse el monje, sus compañeros notaron que su ropa estaba rota y no encontraron el pedazo faltante. Nadie le dio mucha importancia al incidente y todos consideraron que el hábito se había roto antes, atorándose en algún clavo.
Paso el tiempo y fue inútil la búsqueda del nicho donde se suponía había estado antes el sarcófago; ni siquiera las reiteradas exigencias de que se buscara, realizadas por el jefe de los arquitectos, dieron resultado".

La partitura inexplicablemente quemada "Varias semanas después, un joven organista llamado Fermín de Huesca fue a la Catedral a fin de probar el gran órgano español que los trabajadores acababan de montar. No habiendo estado ahí durante la inundación, se sorprendió al ver el sarcófago en el pasillo. Vencido por la curiosidad se acercó y se inclinó sobre el ataúd tratándo de ver qué contenía. Como no distinguiera nada, enrolló una partitura y la metió por el agujero de la tabla. De pronto, escuchó un crujido en el interior y algo se aferró al papel. El organista retiró bruscamente las hojas y lanzó un grito al ver que una buena parte había sido arrancada y que la orilla del pedazo que aún tenía en las manos estaba quemada.
El hombre echó a correr aterrorizado y se topó con uno de los sacerdotes, que lo tranquilizó con muchos trabajos. El monje dijo al organista que seguramente una rata le había arrebatado parte del papel, pero el músico siguió insistiendo una y otra vez en que el jalón había sido muy fuerte para tratarse de un roedor y que, por otra parte, era imposible explicar la razón de que las hojas se hubieran quemado".

Se intenta un Exorcismo "Alarmado por estas cosas, el padre superior de la orden decidió que era hora de abrir el sarcófago y conocer su contenido, y para este menester se hizo acompañar por miembros del Santo Oficio y otros clérigo. Ya reunidos decidieron no correr riesgos con el ser que pudiera estar dentro del ataúd, y se prepararon para efectuar el exorcismo. Los representantes de la iglesia ordenaron vaciar el recinto y pusieron a una persona cuidando la puerta con órdenes de no dejar pasar a nadie. Luego, se reunieron alrededor del sarcófago y trataron de levantar la tapa. Su primer intento falló lamentablemente pues el mármol no se movió ni un centimetro. Pero, de pronto, cuando uno de los padres murmuró unas palabras en latín, la tapa salió volando y quedo a un lado sin causar daño alguno. Fue como si las puertas del mismo infierno hubieran sido abiertas. La tierra tembló bajo sus pies, escucharon los candelabros de plata y bronce chocar entre sí, y acompañando todas estas horribles señales se percibía una combinación indescriptible de grito y rugido que heria despiadadmente sus oídos. Y, ante los espantados ojos de todos los ahí reunidos, del sarcófago se levantó una forma de horror puro que se remontó hacia el techo abovedado. En ese preciso instante, como al soplo de un viento ultraterreno, todos los cirios se apagaron. Pasada la primera impresión de terror, alguien reaccionó y encendió varias velas que alumbraron lo suficiente para ver que el señor Cervantes, uno de los miembros del Santo Oficio, y el padre Fray Antonio de Medina, yacían muertos en el suelo, con el rostro desfigurado por el terror".

Unas horribles huellas sobre el lodo "Pero no terminó ahí el horror, pues uno de los trabajadores señalo una huellas perfectamente marcadas en el lodo que cubría el piso desde la inundación. Eran unas pisadas, ¡pero los pies no pertenecían a ningún ser nacido de mujer! Eran más grandes, mucho más, que las de un humano y cada una de ellas tenía tres dedos largos y puntiagudos. Las huellas partían del ataúd y se alejaban hacia un lado, ¡desapareciendo súbitamente como si quien las marcó se hubiera lanzado a volar! De pronto, uno de los hombres gritó señalando el sarcófago; y todos pudieron ver en el fondo de éste, los restos de la partitura de Fermín de Huesca y el pedazo de paño del hábito sacerdotal desgarrado; Aquí terminaba abruptamente la narración". ¿Realmente terminaba esta terrible Historia? Para los investigadores el relato quedó incompleto, y coincidieron en que al manuscrito le faltaban varias páginas, pues un caso que tuvo lugar en 1935 indica que de alguna manera el demonio de la Catedral fue vuelto a aprisionar en el sarcófago.

Según Robert Freeman , al investigar los eclesiásticos halló abundante docementación sobre unos albañiles que, al estar cambiando de lugar un atril en el año mencionado, encontraron el sarcófago maldito detrás del Altar de los Reyes.
Cuando el ataúd fue retirado se encontraron sobre él diversas nota indicadoras de que se había llevado a cabo un exorcismo. Asimismo, el hoyo en la tapa estaba obturado y sobre ésta se había garbado una inscripción muy curiosa: IVA CUVABIT LAMIA , frase en latín que quiere decir: "Aquí encontrarán algo escondido".

El manuscrito fue devuelto a su dueño y Robert Freeman supo que aquél lo vendió en el año 1975 por la cantidad de 1,600 dólares, a un museo de Barcelona, España, donde actualmente se encuentra en exhibición.
Por lo que se refiere al ataúd. parece ser que fue llevado a los sótanos de la Catedral Metropolitana, donde hasta la fecha se encuentra, conteniendo en su interior al... HORROR DESCONOCIDO ó mejor dicho "EL DEMONIO DE LA CATEDRAL DE MEXICO".

jueves, 4 de abril de 2019

KIMBERLY

Kimberly  fue encontrada muerta  en un canal  en la colonia Santa Elena, había sido violada y mutilada de una manera perversa, presentaba huellas de tortura y tenía sus pechos mordisqueados y los genitales dañados por diversos cortes.

Lo que quedaba de su ropa estaba manchada de sangre y en su ropa interior había restos de semen, tendría unos 14 años y era residente de la colonia Emiliano Zapata. La gente poco a poco se fue olvidando de ella... Había una familia que vivía muy cerca al lugar donde fue hallada muerta, tenían una hija menor que acostumbraba a jugar por esos alrededores, en una de esas ocasiones se topó con una pulsera con un corazón, era de plata y tenia escrito el nombre de “Kimberly” en la parte trasera. La tomó sin pensar y desde aquel día nunca la soltó.

Desde ese suceso empezó a ocurrir algo inusual con la niña, se quedaba viendo fijamente al canal por un buen rato con la mirada perdida, la niña decía que veía a una muchacha asomarse y le tendía la mano para que la ayudara, Por la noche Jennifer se despertaba gritando después de haber tenido pesadillas, la niña decía que se veía a si misma siendo atacada por un señor que la golpeaba y la cortaba. 
Lo peor sucedió una noche ella que no regresaba, nadie sabía de ella, unos decían haberla dejado en el canal jugando, temiendo lo peor llegaron al canal después de buscarla entre la oscuridad la hallaron, estaba sucia y llena de lodo apestoso, la niña tenía la mirada pérdida y no decía una sola palabra, angustiados los padres la llevaron a su casa, la limpiaron y la acostaron. 
La noche transcurrió tensa, los padres no sabían qué hacer, de pronto un grito de terror los alertaba, esta vez era de la hija más grande, el padre salió para ver que sucedía, la jovencita estaba afuera del baño y temblaba señalando la ventana del cuarto. -Ahí estaba, era una muchacha papá, tenía sangre por todos lados-
-¿Qué muchacha, dónde está?- -No sé, desapareció cuando me di cuenta que estaba ahí, le pregunte que quién era y me miro y  desapareció. 

Después se escuchó los gritos de la esposa, Jennifer había desaparecido, desesperados salieron a buscarla vieron a lo lejos a la niña corriendo en por las calles todos salieron detrás de ella, cuando la alcanzaron la vieron entrar en un tubo de desagüe del canal donde jugaba, al bajar la vieron sentada llorando desconsoladamente, como pudieron la sacaron del lugar y la llevaron a la casa. 

-¿Por qué haces esto Jennifer? Preguntó la mamá 
La niña habló entre dientes
-Es la muchacha muerta, ella me habla entre sueños, la muchacha muerta se llamaba Kimberly, ella me dijo quien la mató

Al decir esto, todos se quedaron en silencio, recordaron el crimen de la joven y que el asesino no había sido encontrado
-¿Quién fue?

El rostro de la niña cambió, ahora reflejaba una cara llena de ira, alzó la mano en la que apretaba la pulsera de plata que encontró en el canal, y vio fijamente a su papá, que se encontraba en la habitación y lo señalo, diciendo con una voz grave y adulta. 

-Fue él, mi papá

Leyenda urbana Mexicana


viernes, 27 de enero de 2017

LA NIÑA DEL BANCOMER

Hace algunos años, allá por 1996, en el actual edificio de Bancomer de la ciudad de Matamoros Tamaulipas, ubicado en las calles Sexta y Matamoros, se dio el caso de una niña que se aparecía en las madrugadas al personal de seguridad de la empresa…

El protagonista de esta historia es don Francisco Javier Cotera Correa, quien se quedaba por lo regular a trabajar hasta las 7 u 8 de la noche y en cierta ocasión se le encargó un trabajo especial, quedándose hasta la una de la madrugada.

Don Francisco sabía de ruidos, sombras y uno que otro aparecido… pero esa vez, por quedarse fuera de su horario habitual, al salir ya rumbo a casa, al llegar a las escaleras, vio una niña vestida de blanco que lo saludó con su manita del otro extremo de la sala, ya que los dividía una cortina de persianas verticales de vidrio, es decir, la niña por un lado y el señor por el otro.
Confiado, bajó por las escaleras desde el segundo piso y al llegar a la planta baja, le preguntó al guardia de seguridad del banco:

-“Oye, ¡de quién es la niña, de Rossy, la de contabilidad?”.

-No, no hay nadie, sólo estabas tú. Le contestó el guardia.

-¡Cómo, no es posible! Acabo de ver a una niña ahorita. Devolvió el comentario.

Entonces le explicó lo que había visto y la describió con más detenimiento. A lo que el guardia le explicó que en todo el banco sólo estaban ellos dos.

Total, subieron rápido, encendieron las luces y revisaron todo.
El guardia le preguntó a detalle y Don Francisco le responde de nueva cuenta:
-Era blanca de cabello negro, rizado y su vestido era blanco con encajes.
¡Ah, es la niña! No te apures, es la niña que se aparece.-Le contestó-.

-¿Ah, no friegues? ¿Cómo que se aparece una niña? Dijo asombrado.
-¡Jamás vuelvo a trabajar aquí, jamás! Jamás después de las siete… ¡Se va el último y me hablas para irme yo también! –Le pidió-.

Lo sorprendente del caso fue que el guardia corroboró lo visto por don Francisco… y él no era la única persona que había experimentado tan extraña aparición, ya que también la habían visto varias personas y en repetidas ocasiones.
Por lo común, sonaban extensiones telefónicas, se escuchaban los teclados de las máquinas de escribir, así como el ruido de las sumadoras trabajando y los rodillos jalando y que sí, que se aparecía la niña.

Para esto, los guardias estaban acostumbrados a esas situaciones y lo tomaban como lo más normal del mundo.
Se dice que el edificio de Bancomer que hoy se levanta en ese lugar, antiguamente fue un Hospital Infantil o una guardería y que no nada más se conoce a esa niña… sino que hay más de ellos.

Fantasmas, aparecidos, sombras… pero siempre niños. Posiblemente ahí fallecieron muchos y hoy en día están paseando sus almas, sus almas en pena por todas las instalaciones.

lunes, 21 de noviembre de 2016

El venado, el faisán y la serpiente de cascabel


Los mayas tienen una leyenda muy hermosa que cuenta sobre la creación de la tierra, la cual fue creada por el señor Itzamná. Él hizo cada rincón del planeta como un hermoso lugar para habitar, pero también se encargó de hacer El Mayab, sitio en donde dejó vivir al maya y donde también puso 3 animales especiales. Los animales que escogió Itzamná fueron el faisán que voló por los cielos de El Mayab y conoció cada uno de sus árboles, así como paisajes; el venado, que corrió por todas partes y fue muy feliz en su tierra; y por último la serpiente cascabel que se arrastró por toda la tierra y las aguas sin dejar de hacer sonar su cascabel de felicidad.




Los hechiceros de los mayas se reunieron porque tuvieron visiones muy feas acerca de lo que se venía y por ello reunieron a toda la tribu, les dijeron en ese momento que el hombre vendría a quitarles sus tierras, que ganarían finalmente El Mayab. Lo que el hombre maya debía hacer luego de haber perdido este lugar de encanto era esperar y estar atentos a las señales, ya que cuando llegue el momento de recuperar sus tierras, el venado correría más rápido que nunca, el faisán volaría mostrando su sombra en todas partes y la serpiente cascabel haría sonar nuevamente su música tan fuerte que se escucharía en cualquier lugar. En ese momento sería cuando los mayas tendrían que juntarse para pelear por la tierra que les pertenece.

LEYENDA MAYA DE MÉXICO

sábado, 17 de septiembre de 2016

EL CRÁNEO Y LA BODA



Cuentan los abuelos,hace mucho tiempo tal vez unos 47 años más o menos,un joven que en fechas futuras contraería nupcias paseaba con los amigos una noche,ya de regreso a sus casas tenían que cruzar por el panteón del pueblo.
Venían distraídos y riendo cuando se pronto se encontraron con un cráneo humano sobre el suelo; al joven no se le ocurrió mejor cosa que decir “te invito a mi boda”; y le propinó una patada como si de un balón de fútbol se tratara.
Llegó el día de la boda,todo era alegría,felicidad y golgório.La música sonaba y la gente bailaba y reía.
De pronto alguien llamó a la puerta ,el novio estaba ocupado y fué uno de los amigos quien fué a atender el llamado,abrió la puerta y se escuchó una voz cavernosa que dijo:“ ¿puedo hablar con el novio?”.El amigo entró a buscarlo y le dijo que le buscaban.
El novio acudió a la puerta,sacó la cabeza vió hacia ambos lados y no vió nada,hasta que dirigió la vista al suelo ,y ahí estaba en el suelo un cráneo que le hablaba y le dijo: “he venido a tu boda,recuerda que tu me has invitado”.
Diciendo eso,el joven cayó muerto de la impresión causada y la boda tuvo que ser suspendida por obvias razones.
Todo por no respetar a los difuntos.
Historia popular de Guanajuato México,transmitida de forma oral por los ancianos.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

EL MONUMENTO A LA LLORONA




Por la carretera que conecta a Dolores Hidalgo con San Luis de la Paz, ambas ciudades en Guanajuato, se ubica la ex-hacienda 7 Reales, hoy en día un caserío que aún conserva parte de la casa grande y la iglesia. Dentro de los predios de la ex-hacienda, entre las tierras de cultivo, hay un monumento singular que se puede ver desde el camino en épocas de siembra. Dicho monumento, hecho de cantera, es el dedicado a la Llorona.
Según se puede leer en una inscripción labrada en la cantera, este monumento se levantó un día de septiembre de 1913. De acuerdo con una leyenda, debido a que la Llorona había estado rondando esos parajes y la gente andaba muy asustada, el dueño de la hacienda mandó traer a un sacerdote, quien hizo un exorcismo y sugirió levantar el monumento, y desde entonces la ánima chocarrera dejó de merodear los alrededores.
En la misma inscripción también se lee que aquella persona que rece un Ave María frente al monumento tendrá 300 días de indulgencia.
Los lugareños explican que la capilla de la hacienda está dedicada a San Miguel Arcángel y su fiesta se realiza el 29 de septiembre de cada año. Sin embargo, en décadas pasadas la conmemoración, las danzas y la misa se celebraban en el citado monumento, pero desde que una tarde de tormenta un rayo tumbó la cruz que antes existía, se decidió que a partir de entonces las festividades se llevasen a cabo en la capilla.

Fuente: síguela en Twitter

lunes, 8 de agosto de 2016

El gobierno de México compró secretamente dispositivos para intervenir celulares



Una vez más el gobierno de México está involucrado en una polémica en torno a la privacidad. El medio Proceso ha informado que una empresa finlandesa vendió al gobierno de nuestro país equipos para intervenir teléfonos celulares.
 En concreto se ha informado que el gobierno compró a la empresa Exfo Oy dispositivos IMSI catchers, los cuales interceptan la comunicación entre un teléfono celular y una torre de algún proveedor para intervenirlos y así recolectar información o incluso modificarla.
Acceden a las comunicaciones y pueden geolocalizar el celular
Tal como apuntan desde R3D, estos IMSI catchers, también conocidos como stingrays, pueden acceder a las comunicaciones, los metadatos y claves de cifrado; lo más preocupante es que también cuentan con capacidad de geolocalizar el dispositivo interceptado y escribir sobre la memoria de éste.
Esta compra fue confirmada por medio de un reporte del Ministerio de Asuntos Exteriores de Finlandia. Ahí se indica que la Unidad de Control de Exportación del Departamento de Relaciones Económicas Exteriores de ese país autorizó en 2014 a la empresa Exfo Oy el envío a México de ciertos dispositivos fabricados por NetHawk que, según la descripción, son:
HERRAMIENTAS DE INTELIGENCIA PARA LA POLICÍA, FUERZAS ARMADAS Y OTRAS ORGANIZACIONES GUBERNAMENTALES PARA COMBATIR EL CRIMEN ORGANIZADO Y LOS TERRORISTAS.

Su utilización viola el derecho a la privacidad
Los especialistas de R3D informan que esta tecnología viola los derechos humanos así como nuestra privacidad. A día de hoy el gobierno de México no ha informado el uso que le están dando a los equipos o qué dependencia los está utilizando.

También es preocupante que en el Portal de Obligaciones de Transparencia no se encuentra información sobre contratos con la empresa Exfo Oy, así que, tal como indican en Proceso, la tecnología se pudo haber adquirido por medio de un intermediario.
 No es la primera vez que se sabe que el gobierno de México adquiere herramientas de espionaje. En julio de 2015 se confirmó que nuestro país era el mayor cliente de Haking Team, una empresa dedicada a crear software de espionaje.
Con información de "proceso"

domingo, 3 de abril de 2016

EL CARBUNCLO O CARBUNCO



El carbunco o carbunclo se dice que es un animal mitológico,en perú se dice que tiene forma de perro,con una piedra en forma de rombo en la cabeza,y que el que se lo encuentra y no es poseído por la ambición le escupe una bola de oro,En ecuador en las zonas del centro y el norte de esta región se lo describe como el perro del diablo, que tiene un lucero en la mitad de su frente y ojos de fuego que paralizan a cualquiera que lo vea.

Aparece ocasionalmente en las noches oscuras y en los lugares solitarios.
La persona que se llegue a encontrar con este ser, puede resultar favorecida, pues quienes conocen de esta leyenda cuentan que el Carbunco entrega y vomita una bola de oro incrustada de piedras preciosas… pero, quien recibe estas alhajas no debe mostrarse ambicioso, porque si lo hace –de inmediato- el Carbunco lo descubre, quita el tesoro y se lo traga, desapareciendo inmediatamente en la oscuridad, mientras que la persona que se mostró ambiciosa puede quedar ciega o paralizada.

En el sur de la sierra, su implicación maléfica está más atenuada. En esta zona se describe al Carbunco como un gato negro con un diamante en la frente que emite un gran destello. Los individuos que lo encuentren deben perseguirlo con un pañuelo o manta blanca para atraparlo y quitarle la piedra preciosa de su frente.

No obstante, quien ha logrado capturar al Carbunco y le ha arrancado el diamante, es interpelado luego por éste, quien con una voz llorosa suplica que devuelvan la gema, por la cual este ser sobrenatural está dispuesto a dar cualquier cosa…
Aprovechándose de esto, sus captores las riquezas que ambicionado, y cuando le devuelven el diamante, el Carbunco desaparece y con él todas las esperanzas de hacer realidad sus ambiciones…
En fin, el Carbunco es el ser que castiga a los ambiciosos y premia a las personas desinteresadas



                         según este relato del señor,es un pájaro con un diamante en el pecho

pero ahora va mi historia:

cuenta mi tía que un día mi tío Amilcar salió de cacería en  la noche,junto con otro amigo  de nombre Hernán de pronto vio a lo lejos algo que emitía un gran haz de luz,el creyó que era otro cazador con una linterna en la cabeza,le hizo señales con su linterna y  la contraparte respondía igual,se dirigió hacia él y vio que no se trataba de eso; sino que era un animal que estaba sobre una piedra y que emitía una luz que era tan potente que llegaba hasta las montañas próximas en cuanto Amilcar dirigió la luz hacia el animal para apuntar con el arma,vió que era algo parecido a una iguana grande pero tenía una especie de diamante en la cabeza,justo en ese momento apagó la luz con una una especie de párpado que cubría la piedra y se escabullió,lo siguió y el animal repitió lo mismo,pero mas dentro de la espesura,hasta que Amilcar decidió mejor ya no seguirlo,ya que según el no era un animal bueno.



fuente:
inspirada en una historia contada por mi tia Maria Luisa y
con informacion adicional de las siguientes fuentes.

http://ecua-torianisimo1.blogspot.mx/2009/02/carbunco.html
http://leyendadeterror.com/leyenda-del-carbunco/

martes, 26 de mayo de 2015

el perro y el demonio kakasbal (México-Yucatan)



Un hombre era tan pobre que siempre estaba de mal humor y así no perdía la ocasión de maltratar a un infeliz perro que tenía. Kakasbal [espíritu del mal], que está en todo, vio que podía sacar partido de la inquina que seguramente el perro sentía contra su amo y así se le apareció y le dijo:
Ven acá y dime qué te pasa, pues te veo triste.

Cómo no he de estarlo si mi amo me pega cada vez que quiere respondió el perro.

kakasbal


Yo sé que es de malos sentimientos. ¿Por qué no lo abandonas?
Es mi amo y debo serle fiel.
Yo podría ayudarte a escapar.
Por nada le dejaré.
Nunca agradecerá tu fidelidad.
No importa, le seré fiel.
Pero tanto insistió Kakasbal que el perro, por quitárselo de encima, le dijo:
Creo que me has convencido; dime, ¿qué debo hacer?.
Entrégame tu alma.
¿Y qué me darás a cambio?.
Lo que quieras.
Dame un hueso por cada pelo de mi cuerpo.
Acepto.
Cuenta, pues...

Y Kakasbal se puso a contar los pelos del perro; pero cuando sus dedos llegaban a la cola, éste se acordó de la fidelidad que debía a su amo y pegó un salto y la cuenta se perdió.

¿Por qué te mueves? le preguntó Kakasbal.



No puedo con las pulgas que me comen día y noche. Vuelve a empezar.

Cien veces Kakasbal empezó la cuenta y cien veces tuvo que interrumpirla porque el perro saltaba. Al fin Kakasbal dijo:

No cuento más. Me has engañado; pero me has dado una lección. Ahora sé que es más fácil comprar el alma de un hombre que el alma de un perro.

autor anónimo

"Leyendas y Consejas del Antiguo Yucatán"
Ermilo Abreu Gómez.
Fondo de Cultura Económica

viernes, 29 de agosto de 2014

POR QUE SUENAN LAS GAITAS EN MEXICO?


. El Batallón de San Patricio FUE Una Unidad militar mexicana Que se Formó Principalmente Con soldados del Ejército de los ESTADOS UNIDOS Que desertaron Y Si unieron a las Fuerzas armadas de México en la Guerra de Intervención Norteamericana de 1846-1848 Fuente:  elvocerodigital.com



.Aproximadamente un 45% eran inmigrantes irlandeses y el resto de otros países católicos. Tomaron el nombre del Santo Patrono de Irlanda. Los San Patricios tienen un origen incierto, pues se sabe muy poco con certeza de su reclutamiento. Una historia popular (que es la base de la película de 1999 Héroes sin Patria -One Mans Hero-, en la que Tom Berenger interpreta al comandante de la brigada John Riley) relata que el núcleo de la unidad se formó como consecuencia de los severos castigos sufridos por soldados católicos (especialmente irlandeses) debido a la desconfianza que los mandos militares norteamericanos tenían en contra de ellos, ya que, por motivos religiosos, los consideraban más cercanos a Roma que a Washington, y por lo tanto, más afines a la causa de los mexicanos que en el fondo compartían su misma religión. 


                                     Homenaje al batallon de san patricio en la ciudad de México 



A esos castigos se añadía que, en efecto, esos soldados sí se identificaron con la causa mexicana al reflexionar lo injusta que era la invasión contra México, sintiéndose hermanados en ideología religiosa con el pueblo invadido y dándose cuenta que los estadounidenses estaban agrediendo a México en su cultura y creencias, como los ingleses lo habían hecho con los irlandeses. Aprovecharon, además, que el ejército de México reclutaba activamente soldados católicos del ejército estadounidense y ofrecía importantes concesiones de tierras a quienes abandonaran el ejército de Estados Unidos en favor del de México. Es obvio decir que era una decisión difícil, pues resultaba más seguro permanecer en las filas estadounidenses.

El primer combate, de los San Patricios como unidad mexicana es la Batalla de Monterrey (21 de septiembre de 1846), con una batería de artillería al mando de John Riley, anteriormente teniente del Ejército de Estados Unidos e inmigrante irlandés. Sirvieron con distinción y está acreditado que rechazaron con éxito dos diferentes asaltos al corazón de la ciudad. A pesar de su tenacidad y valor, y de que Taylor estaba a punto de abandonar el ataque, el comandante mexicano Pedro Ampudia, desesperado, pidió parlamento, consumando la derrota.

Como unidad de infantería los San Patricios continuaron sirviendo con distinción; en la Batalla de Churubusco (20 de agosto de 1847), las maltrechas fuerzas mexicanas se establecieron en el convento de Santa María de Churubusco, y las fuerzas armadas estadounidenses se prepararon para atacarlos. Los defensores mexicanos sumaban 1.300 personas y pertenecían a los batallones Independencia, Bravos y San Patricio. En esta batalla los San Patricios mostraron con su valor y entrega que la nacionalidad y el origen nada tienen que ver cuando se emprende la batalla por una causa justa. La lucha fue constante y desfavorable para los mexicanos, esta vez bien mandados y motivados por los generales Manuel Rincón y Pedro María Anaya. 

Tras algunas horas de combate, las fuerzas mexicanas se quedaron sin municiones y una bomba provocó una explosión en la reserva de pólvora que los dejó sin posibilidades de seguir defendiéndose; a pesar de lo cual y una vez que se izó una bandera blanca en señal de rendición, el capitán Patrick Dalton la abatió para seguir resistiendo, pero ya era inútil, el convento quedó en silencio. Cuando el general Twiggs entró al patio del convento, exigiendo a los soldados mexicanos que entregaran las armas, la pólvora y el parque, el General Anaya se le enfrentó, diciendo: Si hubiera parque, no estaría usted aquí.

Los miembros del Batallón de San Patricio capturados por el ejército estadounidense sufrieron muy duras represalias; habían sido responsables de algunos de los más duros combates (y que causaron más bajas) a los que los estadounidenses se enfrentaron. Los que formaban parte del ejército estadounidense antes de la declaración de guerra oficial (el capitán Riley entre ellos) fueron azotados y marcados con hierro candente en la cara, con la letra D de desertores, y sentenciados a trabajos forzados. Los que entraron en el ejército mexicano tras la declaración de guerra, fueron ahorcados en masa como traidores, viendo de frente el sitio de la Batalla de Chapultepec el 13 de septiembre de 1847 (con anterioridad otros habían sido ejecutados en San Ángel el 10 de septiembre del mismo año). Por orden del General Winfield Scott, fueron ahorcados precisamente en el momento en que la bandera de Estados Unidos reemplazó a la de México en lo alto de la ciudadela. Cuando la bandera alcanzó lo más alto del asta, se abrió la trampa del cadalso.

Los restos del batallón fueron comisionados para sofocar algunos levantamientos aislados después de firmada la paz con los EE.UU.

Los que sobrevivieron a la guerra desaparecieron de la historia. Unos pocos pudieron reclamar las tierras prometidas por el gobierno mexicano. John Riley murió a finales de agosto de 1850, y fue enterrado en Veracruz el 31 de agosto de ese año, con el nombre de Juan Reley, el mismo con el que se hallaba inscrito en los archivos del Ejército Mexicano. Ese mismo año el Ejército Mexicano tomó la decisión de disolver el Batallón.

Como muestra de agradecimiento a los integrantes del Batallón de San Patricio que se unieron al ejército mexicano, actualmente existe una calle en los alrededores del Ex-Convento de Churubusco (en ese entonces Convento de Santa María de Churubusco) llamada Mártires Irlandeses, cada año se realiza en este lugar un pequeño concierto de gaitas por los descendientes del Batallón de San Patricio. El Batallón es conmemorado en dos diferentes días en México; el primero el 12 de Septiembre, el aniversario de las ejecuciones, y el otro el 17 de marzo, día de San Patricio.

El 29 de abril de 1999, el Congreso de la Unión declaró a los combatientes civiles y militares de la guerra de invasión estadounidense como Beneméritos de la Patria.

Por gratitud y afecto, los mexicanos debemos recordar siempre y rendir homenaje a los héroes del Batallón de San Patricio, irlandeses de corazón mexicano.

...asi que un poco mas de respeto para esos heroes con faldas.